Un delincuente aprovechó que el ídolo del Tricolor estaba saludando a los aficionados y le sustrajo el teléfono del bolsillo del pantalón. El ex zaguero uruguayo logró capturarlo antes de que huyera y llamó a la policía.
El San Pablo disfrutó de un logro histórico al ganar por primera vez la Copa de Brasil luego de empatar en la revancha de la final 1-1 con Flamengo en el Morumbí y los festejos se vieron empañados en las inmediaciones del estadio con un hecho relacionado a la llegada del ex futbolista Diego Lugano. El defensor uruguayo, ídolo del tricolor paulista, se acercó a saludar a los torcedores y, en el tumulto, una persona le sustrajo el celular de su bolsillo.
Lugano se dio cuenta al instante del robo que había sufrido y frenó la huida del ladrón, a quien tomó por la espalda. “Llamen a la policía”, alcanzó a decir el uruguayo de 42 años en portugués para que sus fanáticos ayudaran a recuperar el teléfono sustraído. “Dale su celular”, le gritaron algunos, mientras otros fueron directamente a hacer justicia por mano propia, derribando al delincuente y golpeándolo en el suelo con trompadas y patadas.
En otra de las imágenes publicada en redes sociales por hinchas del San Pablo se puede ver al hombre en el suelo y reducido, hasta la llegada de los oficiales de la policía, que lo esposaron y se lo llevaron detenido. El ex defensor de la selección uruguaya efectuó más tarde la denuncia ante las autoridades correspondientes.
“Un hombre de 32 años fue detenido por robo, en la tarde del domingo 24 de septiembre, en la plaza Roberto Gomes Pedrosa, en Morumbi. Policías militares de choque patrullaban los alrededores del estadio cuando fueron llamados por fanáticos, quienes denunciaron que sujetos estaban robando teléfonos celulares. Luego, encontraron que el acusado estaba detenido y siendo atacado por miembros del público. Una de las víctimas, un ex jugador del San Pablo de 42 años, denunció que el hombre, luego de quitarle su celular, se lo entregó a otra persona. El caso fue registrado como hurto en la comisaría 33ª DP (Pirituba)”, fue el escrito policial luego del suceso de inseguridad, según lo publicado en el sitio de O’Globo.
