Definitivamente mucho hemos hablado de los disparates del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre todo porque en sus flamígeros comunicados y puntuales amenazas comerciales, y en un análisis muy general, han sido más los golpes que los puntos en donde se hace equipo con México.
Y estoy siendo muy generoso cuando digo que con nuestro país ha sido hasta cierto punto cauteloso, pero la realidad es que desde el minuto uno en el poder, ha buscado debilitarnos y generar el entorno para que las nuevas empresas que buscaban instalarse en el norte de México, ahora se instalen en Estados Unidos, pero se ha topado con el Tratado de Libre Comercio, y en algunos temas como en la producción de vehículos, prefirió dar un pasito para atrás y concentrarse en lo que de verdad le duele, el crecimiento de China como potencia.
Al ritmo de esta guerra comercial y de imposición de aranceles de ambos lados, la consecuencia es que las bolsas de Estados Unidos y del mundo, han caído al menos un 17%, lo que se traduce en que las empresas norteamericanas, valen cientos y cientos de millones de dólares menos que antes de la toma de protesta de Trump.
En sencillas palabras, aunque ahorita Trump se desvive en buenos comentarios hacia la presidenta, Claudia Sheinbaum, que dicho sea de paso, considero ha hecho un excelente trabajo de negociación, el “coletazo” con o sin aranceles por el T-MEC, resulta una realidad y en cuestión de meses será muy perceptible para la economía mexicana, ante ello creo que como país, necesitamos apostar por dos temas en donde tenemos mucho potencial, además entraría dinero a raudales y le competiríamos a los estadounidenses directamente.
Dichos temas son la aprobación de la venta de la mariguana y la extracción y comercialización del famoso Gas Shale.
Comenzando por la venta del Cannabis, y aunque en la mayoría de los estados del vecino del norte tienen aprobada la venta médica y lúdica, y por ende nos llevan ventaja, considero que nuestro país tiene ventajas climatológicas envidiables que, en cuestión de meses, estaríamos exportando toneladas métricas de mucho mayor calidad que la que se cosecha allá.
En cuestión recaudatoria, la venta de la mariguana sería un gran aliciente para el Gobierno de México, que día a día está obligado a encontrar más fuentes de ingreso. Solo hay que recordar que actualmente en México es legal consumir dicha planta, por lo que veo un contrasentido en que se pueda comprar, pero no se pueda vender.
Asimismo, creo que nos agrade o no, en algún momento se legalizará, y que mejor hacerlo en estos momentos, cuando está comprobado que la mariguana es mucho menos dañina que otras drogas legales como el alcohol o los cigarrillos y cuando es urgente recaudar ante los efectos de la notoria recesión.
Finalmente, el Gas Shale, que por ejemplo en Texas se ha convertido en una de las principales fuentes de ingresos y solo para darnos una idea, entre gas y petróleo, dicho estado y vecino nuestro, genera más de 26 mil millones de dólares en impuestos estatales, o lo que es igual a 72 millones diarios, que se van a escuelas o carreteras.
Entidades como Coahuila, cuentan con buenas condiciones para aprovechar la fractura hidráulica, aprovechar los miles de millones de pesos y de paso competir directamente con los estadounidenses. En este tema particularmente, considero que cuando se habla de riesgos ambientales, nos intentan “asustar con el petate del muerto”, porque definitivamente a alguien no le interesa tener competidores tan cerca.
En fin, son solo ideas para voltear a ver otras opciones, cuando nos tienen con el pie en el cuello y sobre todo cuando apenas empezará a sentirse lo duro de los “coletazos” generados por el “Tío Sam”.