La reciente victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses coloca a México en una posición de especial sensibilidad. Los lazos de ambos países son profundos, no solo por los 3,000 kilómetros de frontera y el extenso comercio bilateral, sino también por millones de familias que viven en ambos países. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, buscó calmar las aguas en conferencia de prensa: “No hay motivo de preocupación (…) México siempre será un país independiente y soberano”, afirmó, subrayando que ambos países son complementarios. Sin embargo, los desafíos están a la vista.
A continuación, se presentan los cuatro temas clave para la relación México-EE.UU. durante los próximos años:
- Economía
La victoria de Trump impulsó la caída del peso a su nivel más bajo en dos años, debido a temores de que sus políticas proteccionistas afecten la economía mexicana. Trump ha prometido imponer altos aranceles a productos mexicanos y sancionar el tránsito de productos chinos a través de México. Además, un posible ajuste al Tratado de Libre Comercio (T-MEC) es una amenaza latente para México. La presidenta Sheinbaum deberá navegar estas políticas proteccionistas mientras defiende la estabilidad económica del país. - Migración
Trump ha reiterado su intención de deportar a millones de migrantes y continuar la construcción del muro fronterizo. Aunque el costo de estas políticas podría frenar su implementación, cualquier medida en esa dirección tendría efectos significativos para México, donde se estima que cinco millones de personas viven en EE.UU. sin documentos. Sheinbaum ha defendido una política de soluciones sociales en los países de origen de los migrantes, pero también deberá reforzar la red consular mexicana para apoyar a sus ciudadanos en EE.UU. - Narcotráfico
El tráfico de fentanilo es una preocupación creciente en EE.UU., y Trump ha prometido medidas severas, como bombardear laboratorios en México y bloquear puertos. Aunque estas propuestas no han sido abordadas aún por Sheinbaum, es probable que sean un punto de tensión, especialmente en un gobierno que prioriza la soberanía. La reciente detención de un capo mexicano sin notificación previa al gobierno mexicano es un antecedente que podría agravar este tema en el futuro. - Relación política
La relación entre Sheinbaum y Trump podría estar marcada por sus diferencias ideológicas: él, un conservador defensor del capitalismo; ella, una progresista con un enfoque feminista. A pesar de las diferencias, el pragmatismo podría prevalecer, como ocurrió entre Trump y el expresidente López Obrador. Expertos esperan que Sheinbaum mantenga una relación pragmática, defendiendo los intereses de México con carácter y un fuerte respaldo popular.
La relación México-EE.UU. enfrenta una nueva coyuntura compleja. Mientras Trump vuelve a la Casa Blanca con una agenda ambiciosa, Sheinbaum asume el liderazgo de México como la primera presidenta, enfrentándose a desafíos únicos.