La reducción de vuelos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) para evitar una saturación de operaciones entrará en vigor hasta los primeros meses del próximo año.
La decisión se tomó luego de establecer una serie de negociaciones con la industria, en donde también se expusieron las consecuencias de esta decisión.
El principal problema, señaló una fuente que solicitó el anonimato, sería una caída en ingresos para las aerolíneas que ya tenían vuelos vendidos para el último trimestre del año, así como para el mismo AICM.
Originalmente, el gobierno federal planteó recortar el número de operaciones máximas permitidas en el aeropuerto de 52 a 43 por hora, una medida que entraría en vigor a finales de octubre.
Ayer, la calificadora Fitch Ratings advirtió que esto también puede exacerbar el riesgo de refinanciamiento de los bonos del emisor con vencimiento en 2026 y 2028 por un monto total de mil 400 millones de dólares.