Con 86 votos a favor y 39 en contra, el Senado aprobó la reforma que devuelve a Pemex y CFE su estatus de empresas públicas del Estado. En una rápida sesión, Morena y sus aliados rechazaron todas las propuestas de modificación presentadas por la oposición.
Los senadores del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano habían reservado artículos para discutir, pero la mayoría parlamentaria desechó sus propuestas. La reforma, que modifica los artículos 25, 27 y 28 constitucionales, fue enviada a los Congresos estatales para su ratificación, como estipula el artículo 135 de la Constitución.