El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, ha decidido cancelar la Expo Ganadera Sinaloa 2024, uno de los eventos más significativos para el estado, tras la aparición de una narcomanta en Culiacán que lo amenazaba a él y a su familia si no se suspendía la feria. La advertencia, que surgió el domingo 10 de noviembre, advertía al mandatario con posibles represalias si no cancelaba el palenque, un espectáculo tradicional de la feria, y dejaba de “apoyar a esos Chaposetas”. El mensaje, colgado en puentes viales de la ciudad y firmado por el crimen organizado, hacía referencia directa a las consecuencias que enfrentaría el gobernador en caso de ignorar esta petición, mencionando específicamente a su familia.
La Expo Ganadera estaba programada para inaugurarse el jueves 14 de noviembre y extenderse hasta el 1 de diciembre, ofreciendo actividades y exhibiciones que promueven el sector ganadero y la identidad cultural de Sinaloa. Con la suspensión de la feria, se estima que habrá un fuerte impacto en la economía local, especialmente para los comerciantes y ganaderos que cada año dependen de este evento para impulsar sus actividades.
A través de un comunicado, la Unión Ganadera Regional de Sinaloa informó que, tras una revisión profunda, se tomó la decisión de cancelar la feria como medida de responsabilidad ante la actual situación de violencia que afecta al estado. Afirmaron que, aunque la feria es esencial para la cultura y economía ganadera de la región, “las condiciones actuales no permiten asegurar su rentabilidad económica ni la seguridad de sus participantes”. La Unión Granadera también subrayó que la cancelación busca proteger a la comunidad y mantener la estabilidad del sector, comprometiéndose a trabajar en el fortalecimiento de la ganadería en Sinaloa a pesar de la situación.
Esta suspensión llega en un contexto de creciente tensión en el estado, con los recientes enfrentamientos entre grupos delictivos tras la captura de Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los líderes históricos del Cártel de Sinaloa. Los expertos indican que estos incidentes y amenazas reflejan un ambiente de inseguridad que podría afectar futuras actividades públicas en Sinaloa, particularmente aquellas de gran convocatoria.
Con esta cancelación, el gobierno de Sinaloa envía un mensaje de que la seguridad y el bienestar de la comunidad son la máxima prioridad, aunque el cierre de uno de los eventos más relevantes para la cultura sinaloense representa una pérdida simbólica para el estado. La administración estatal asegura que seguirá trabajando para fortalecer la seguridad y evitar que la violencia afecte la vida pública y las tradiciones locales.