Queridos lectores de El Ahuizote, en esta edición tenemos el honor de presentarles una entrevista con Francisco Delgado Vázquez, Teniente de la Guardia Número 1 del municipio de Ramos Arizpe. Francisco es un hombre cuya vida ha estado marcada por el servicio a la comunidad, una vocación que lo llevó desde Cruz Roja hasta su actual labor en los bomberos. A continuación, nos comparte su experiencia y los momentos que lo han definido a lo largo de estos años.
Inicios en el servicio y Cruz Roja
- ¿Cómo fue que comenzaste en el ámbito de Protección Civil y Cruz Roja? ¿Quién te invitó a hacerlo?
Mi historia comenzó en 1981, en la Cruz Roja de Saltillo. En ese entonces, yo iba a ayudar a mi papá, quien trabajaba en la construcción. A medida que pasaba tiempo con él, me nació el interés por ayudar a los demás. Fue así como me uní a la Cruz Roja, donde fui capacitado por los compañeros de esa época. Ingresé como voluntario y empecé a hacer guardias en la delegación de Saltillo.
La transición hacia los bomberos
- En 1994, hiciste el cambio hacia los bomberos. ¿Cómo fue esa transición?
El cambio fue interesante, ya que, como paramédico en Cruz Roja, estaba acostumbrado a atender accidentes y emergencias. Sin embargo, en los bomberos el enfoque era diferente, ya que nos enfrentábamos a incendios y rescates. A pesar de que cada labor tiene sus propios desafíos, lo bonito de este trabajo es que siempre estás aprendiendo y te sigues capacitando.
Recuerdos y vivencias en la Cruz Roja
- ¿Cuál es la experiencia más significativa que viviste durante tu tiempo en Cruz Roja?
Una de las experiencias más fuertes fue la tragedia ocurrida durante el paso del huracán Gilberto en 1988. Estuve involucrado en la búsqueda y rescate de mi compañero Miguel Gaitán Medina, quien falleció mientras atendía una emergencia en la carretera. Fue un momento muy doloroso, ya que pasamos varios días buscando su cuerpo en el cauce de un arroyo. A pesar de las adversidades, esa experiencia marcó mi vida y mi carrera.
La amistad en la profesión
- ¿Sigues en contacto con tus compañeros de Cruz Roja?
Sí, aún conservo muchas amistades. Lamentablemente, algunos compañeros ya no están con nosotros, pero seguimos en contacto con los que están. Nos reunimos de vez en cuando para recordar viejos tiempos y compartir anécdotas.
Trabajo en Cablevisión
- Antes de tu carrera en los bomberos, trabajaste en Cablevisión. ¿Cómo fue esa experiencia?
Así es. Después de una entrevista con Martín Berlanga, me uní a Cablevisión en los años 90. Trabajé en varias áreas, principalmente en el sector de instalaciones y reparaciones. Una de las situaciones más impactantes que viví en esa empresa fue cuando un trabajador de la construcción, sufrió un accidente fatal al manipular una escalera cerca de cables de alta tensión. Fue una experiencia que me recordó la fragilidad de la vida y la importancia de la seguridad en el trabajo.
Regreso a bomberos
- ¿Qué te motivó a regresar al trabajo en bomberos después de tu etapa en Cablevisión?
El regreso a los bomberos fue gracias a una invitación de mis ex compañeros de Cruz Roja, como Marco Antonio Gómez y Rafael Dávila. Ellos me animaron a unirme como voluntario y, después de un tiempo, me ofrecieron una vacante. Esa fue mi oportunidad para regresar a lo que siempre había sido mi verdadera pasión.
Un compromiso con el servicio a la comunidad
- Francisco, sabemos que has estado involucrado en numerosos incendios forestales. ¿Qué experiencias puedes compartir sobre esos eventos?
Sí, a lo largo de los años hemos apoyado en muchos incendios forestales, sobre todo en áreas como Lourdes, Loma de la Sierra, Zapalíname y Mesa de las Tablas. En esos tiempos, las cuadrillas forestales eran muy pequeñas, así que los bomberos municipales teníamos que involucrarnos de lleno para ayudar a controlar los incendios y proteger el entorno. Fueron momentos difíciles, ya que el daño a la fauna y la flora era considerable, pero también era un reto que asumimos con mucha responsabilidad.
- Cuando enfrentan situaciones tan extremas, ¿cómo maneja el cuerpo de bomberos esa presión?
El trabajo como bombero requiere tener sangre fría. En momentos de emergencia, debemos ser muy precisos y mantener la calma, ya que las decisiones rápidas y bien fundamentadas pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Cada evento es diferente, y aunque es difícil, siempre tratamos de mantener la calma para hacer bien nuestro trabajo.
El sacrificio personal de ser bombero
- ¿Cómo te hace sentir ayudar a la gente en momentos tan complicados?
Es una sensación gratificante, muy profunda. Saber que estás ayudando a la gente, que la gente se siente protegida por ti, es una satisfacción enorme. Aunque en ocasiones no recibimos agradecimientos, lo importante es que cumplimos con nuestro deber y tratamos de mitigar el sufrimiento de las personas en situaciones de emergencia.
- En tu carrera como bombero, ¿has llegado a poner en riesgo tu vida?
Sí, varias veces. Hay momentos en los que te cuestionas: “¿Qué hago aquí?”, especialmente cuando te enfrentas a situaciones peligrosas. Sin embargo, este es el trabajo que elegí, y a pesar de los riesgos, lo hago con mucho gusto. La vida de un bombero está llena de retos, pero también de mucha satisfacción al saber que estás haciendo una diferencia.
El apoyo de la familia y el sacrificio personal
- Sabemos que tienes una familia. ¿Qué papel han jugado ellos en tu carrera?
Tengo un hijo que, cuando comencé a trabajar en bomberos, apenas tenía unos meses de nacido. Hoy en día, él también es bombero y lleva 12 años trabajando conmigo en la misma estación. Mi esposa y mis otros hijos siempre han estado orgullosos de mi trabajo, aunque a veces he tenido que sacrificar momentos familiares importantes por estar en servicio. A veces, no puedo asistir a reuniones familiares, pero sé que ellos entienden el compromiso que tengo con mi trabajo.
- ¿A quién dedicas tu trayectoria profesional después de tantos años de servicio?
Dedico todo mi esfuerzo y trayectoria a mi familia. A mis padres, que siempre me apoyaron; a mi esposa e hijos, que comprenden las veces que no puedo estar con ellos debido al trabajo. También a mis compañeros de trabajo, porque sin ellos no sería posible hacer bien este trabajo.
Un mensaje para las futuras generaciones
- Para aquellos jóvenes que sueñan con ser bomberos, ¿qué les dirías?
El mensaje que les daría es que sigan sus sueños, que busquen cumplir sus metas. Ser bombero es una carrera muy bonita y gratificante, pero también muy exigente. Si les interesa, deben prepararse, capacitarse y, sobre todo, estar comprometidos con el servicio a la comunidad. Es un trabajo que requiere sacrificio, pero el agradecimiento de las personas es algo que no tiene precio.
El apoyo de la administración y el trato de los alcaldes
- Has trabajado con muchos alcaldes a lo largo de los años. ¿Cómo ha sido el trato con ellos hacia el cuerpo de bomberos?
He visto pasar a varios alcaldes, desde Ernesto Saro hasta la administración actual. En general, el trato siempre ha sido bueno. Algunos alcaldes han estado más cerca de nosotros y se han interesado más en las necesidades del cuerpo de bomberos, pero siempre hemos recibido su apoyo. En la administración actual, con el director Francisco Javier Sánchez Aguirre, hemos visto un crecimiento significativo en el personal, el equipo y el apoyo hacia nuestra labor.
Un mensaje para los compañeros bomberos
- ¿Qué mensaje tienes para tus compañeros de trabajo, especialmente con la inclusión de mujeres en este campo?
Les diría que sigan siendo cada vez mejores, que hagan su trabajo con pasión y profesionalismo. La calidad en el servicio que brindamos es lo que marca la diferencia. Y a las mujeres que se han unido a nosotros, les agradezco mucho su dedicación. Todos somos una gran familia y juntos hacemos un trabajo increíble.
Agradecimiento al director
- Finalmente, ¿qué mensaje tienes para tu director, Francisco Javier Sánchez Aguirre?
Agradezco mucho la confianza que ha depositado en mí y en todo el equipo. Hemos trabajado muy bien juntos y siempre estamos en constante comunicación para que las cosas sigan funcionando de la mejor manera. Sin su apoyo, no sería posible seguir mejorando en cada aspecto.
Francisco Delgado Vázquez es un ejemplo de dedicación, sacrificio y servicio a la comunidad. Su historia refleja no solo el trabajo de un bombero, sino el amor por su familia y su compromiso con la seguridad de todos. Sin duda, su trayectoria es una inspiración para las nuevas generaciones que desean seguir este noble camino.