Más de 10.000 personas han muerto en Gaza desde que Israel lanzó su ofensiva militar hace casi un mes, informó este lunes el Ministerio de Salud del enclave palestino, controlado por Hamas.
Israel le declaró la guerra a Hamas después de que el grupo extremista islamista perpetrara un brutal ataque el 7 de octubre, que cobró la vida de más de 1.400 personas y tomó como rehenes a otras 240. Como represalia, Israel lanzó una ofensiva aérea y terrestre sobre Gaza, prometiendo eliminar al grupo extremista.
Ashraf Al Qudra, portavoz del ministerio, declaró que 10.022 palestinos del enclave murieron por ataques israelíes, entre ellos 4.104 menores, 2.641 mujeres y 611 ancianos. Estas cifras sugieren que aproximadamente tres cuartas partes de los muertos pertenecen a poblaciones vulnerables. El ministerio también informó de 25.408 heridos.
No está claro cuántos combatientes están incluidos en el total. No se puede verificar de forma independiente las cifras publicadas por el ministerio en Gaza, que está rodeada por Israel y bloqueada en su mayor parte por Egipto.
En este último mes han muerto en Gaza miles de palestinos más que los que fallecieron en los conflictos con Israel en los últimos 15 años.
Al menos un menor de edad muere en Gaza cada 10 minutos como consecuencia del conflicto entre Israel y Hamas, según cálculos basados en las últimas cifras publicadas por el Ministerio de Salud de Gaza.
El creciente número de víctimas mortales que han dejado los bombardeos israelíes sobre esta zona densamente poblada suscita la condena internacional.
La Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas afirmó que los ataques de la semana pasada contra el mayor campo de refugiados de Gaza «podrían constituir crímenes de guerra», dada la magnitud de las víctimas y la destrucción.
Israel ha afirmado que su objetivo son los operativos de Hamas en Gaza, añadiendo que el grupo extremista «integra sus activos deliberadamente en zonas civiles» y utiliza a los civiles como escudos humanos, una defensa de la que se han hecho eco funcionarios estadounidenses.