El jefe del ejército israelí, Herzi Halevi, informó a las tropas que los recientes ataques aéreos en Líbano tienen como objetivo debilitar la infraestructura de Hezbollah y preparar el terreno para una posible incursión terrestre de las fuerzas israelíes. Halevi, durante una visita a la frontera norte, explicó que esta operación permitiría que miles de israelíes desplazados por el conflicto en esa región regresen a sus hogares. También mencionó que las fuerzas israelíes están listas para ingresar en áreas donde Hezbollah ha establecido puestos militares y enfrentarán a esta organización con una fuerza experimentada y profesional.
Este anuncio se produce en medio de una intensificación de los ataques aéreos de Israel en Líbano, tras el derribo de un misil lanzado por Hezbollah hacia la sede del Mossad en Tel Aviv, en lo que fue su primer intento de atacar tan profundamente en territorio israelí. Además, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han llamado a dos brigadas de reserva para prepararse para posibles maniobras en el conflicto.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reiteró que Israel no descansará hasta que los residentes del norte puedan volver a sus hogares de manera segura, mientras continúan los intensos ataques contra Hezbollah.