La influencer japonesa Airi Sato fue asesinada mientras realizaba una transmisión en vivo desde las calles del distrito de Shinjuku, en Japón, ante más de seis mil espectadores.
Según los primeros reportes de la policía japonesa, Sato, de 22 años, fue atacada por Kenichi Takano, de 42 años, quien la acuchilló en varias ocasiones. Testigos alertaron a los servicios de emergencia, pero la influencer murió en el lugar debido a las heridas en la cabeza, cuello y abdomen.
El atacante fue detenido poco después del incidente. Takano declaró que Sato le debía alrededor de 2 millones de yenes (aproximadamente 12,400 euros) que había prestado para cubrir gastos personales y para apoyar su carrera como creadora de contenido. El agresor afirmó sentirse manipulado y traicionado por la falta de pago, lo que lo llevó a cometer el crimen.
Las autoridades continúan investigando el caso para esclarecer los detalles del ataque y determinar las acciones legales contra Takano.
