El actor y director Justin Baldoni presentó una demanda este jueves en Nueva York contra Ryan Reynolds y Blake Lively, poco después de que Lively lo acusara de acoso sexual durante la grabación de la película Romper el círculo y de haber liderado una campaña de difamación. En su querella, Baldoni también incluyó a la publicista de Lively, Leslie Sloane, y la agencia de representación Vision PR, acusándolos de extorsión civil, difamación e incumplimiento del pacto implícito de buena fe en el trabajo. Los abogados de Baldoni solicitan que se realice un juicio y que su cliente reciba al menos 400 millones de dólares en daños y perjuicios.
La disputa involucra también a los estudios Wayfarer, la productora Jamey Heath y las publicistas Jennifer Abel y Melissa Nathan, quien sería clave en la campaña de desprestigio hacia Lively. La actriz acusó a Baldoni y a Wayfarer Studios de embarcarse en un «plan de varios niveles» para perjudicar su imagen, el cual incluyó una serie de publicaciones en redes sociales y noticias falsas.
La denuncia de Baldoni argumenta que Lively “arrebató deliberadamente su película” y utilizó amenazas y extorsión para impedir que su equipo asistiera al estreno, mientras ella disfrutaba de la atención mediática. Baldoni también ha demandado a The New York Times por difamación, buscando una compensación de 250 millones de dólares por la publicación de un artículo que, según él, estaba plagado de inexactitudes.