Por Joselo de Velasco
Iniciadas las campañas electorales es justo juzgar los candidatos que nos presentan partidos y alianzas, si bien se ha hablado mucho de los candidatos a gobernador, apenas hace unos días se registraron y conocimos a los actores de la pasarela política que desfilará 59 días en las calles de nuestro hermoso estado.
Un congreso capaz y preparado es fundamental para el desarrollo de un estado, es donde se desarrolla el marco legal que permite o limita libertades, por ende, es el cargo al que el elector más atención debe prestarle y más consciente debería ser su voto. La actual legislatura es por mucho de las más improductivas en los últimos años y esto no se debe sólo a la bancada mayoritaria, la oposición tampoco se ha comportado a la altura y esto se debe a la incapacidad de los diputados, a la escasez de recursos y a no invertir los suficientes en asesores.
La actual legislatura fue un escaparate político con fines electorales y no el privilegio y honor que radica en la construcción del andamiaje legal que rige el desarrollo de los ciudadanos, prueba de ello además de la improductividad, son los 10 diputados del PRI y 2 de morena que buscarán la reelección. Esto es un 48% de la legislatura buscando repetir en el cargo. Cabe señalar que de estos 12 diputados solamente uno (Álvaro Moreira) ha pedido licencia.
Hoy en día mucho se justifica en la trillada frase “lo que la ley permite”, por eso creo necesario recordar el origen de estas permisiones legales. El cumplimiento de la ley para los políticos les exige menos en la actualidad que en años previos a la llegada de Morena al poder. La actual y escueta 3 de 3 con que se registran hoy los aspirantes a candidatos llegó a ser un 7 de 7 que obligaba a ser ciudadanos con integridad probada. Y no olvidemos que la facultad de permanecer en el cargo mientras se realiza campaña fue un privilegio sin sentido que se autorizó en 2018. Cabe cuestionarnos, ¿Cómo va a repartir sus tiempos un político en campaña? El tiempo que no le destinen a ser candidatos, en eventos, reuniones y demás será el que destinen a la diputación. ¿No buscan acaso todos los partidos candidatos que les den el 100% en campaña? La respuesta es sencilla, los políticos actuales aprovechan la permisividad que la 4T les brinda (Y los vemos en todos los partidos). Y ni hablemos de las diputadas (en especial las que agitan banderas feministas) que salieron buenas para exigir espacios cuando se trataba de quitárselos a los hombres, pero cuando se trata de su curul salieron muy malas para cederlo y ayudar a otra mujer a llegar al congreso.
Existe también una crítica común al partido en el poder, “siempre son los mismos” cabe con la reelección de 10 diputados (62%), pero también es justo mirar a los candidatos de la oposición, Morena busca reelegir a 2 de 5 diputados (40%), también es justo señalarla para el partido que se siente diferente. Y por otro lado es importante que se voltee a ver a los candidatos que mandan los partidos que “abren la puerta al pueblo”, un congreso no puede conformarse con gente sin preparación ni trayectoria. Decirlo no es elitismo sino llamado al sentido común, así como nadie quiere operarse con un doctor sin experiencia, viajar con un piloto sin conocimientos o tatuarse con en un establecimiento sin licencias de salubridad, nadie debería votar por un político sin cartas credenciales. Pobre del estado que vea a su congreso como una escuela porque entonces enseñarán que la política no demanda y que el pueblo no merece.