La educación siempre ha ocupado un rol fundamental en la transmisión y preservación del conocimiento de generación en generación. La posibilidad de enseñar, va mucho más allá de simplemente ofrecer a los jóvenes técnicas y saberes objetivos que memorizar y ejercitar para permitirles adquirir un oficio. Educar es también transmitir valores fundamentales, enseñar una visión de mundo y afianzar las conductas o modos de pensar. Es perpetrar un sistema y a la vez sembrar las semillas del cambio venidero.
¿Pero nos hemos preguntado desde cuando se educa?
Para entender esto es necesario remontar a la historia, pues naturalmente proviene de la antigüedad, cuando surgieron los primeros modelos de enseñanza que funcionaban de la mano con la religión, como los mandamientos judeocristianos en el pueblo de Israel para convencerlos de seguir ciertas normas, de respetar valores inclusive de realizar ritos. Hay muchos otros como las tradiciones de China, India y Egipto en las que se enseñaba al plebeyo a desempeñar tareas campesinas a base de la imitación por parte de la familia o de los oficiantes locales las cuales se impartían de manera oral y por repetición, enseñanza que limitaba el aprendizaje a la memorización critica o mejora de técnicas y permitía la distorsión del mensaje transmitido.
Para el surgimiento de la escuela se hizo necesaria la invención de la escritura con lo que fue posible que las ideas perdurarán de generación en generación a través de textos o libros que se difundían. De ahí que los primeros sistemas educativos consistieron en alfabetizar y en leer textos religiosos con dibujo y geometría, como lo fue en Grecia que se enfocó en principio a hijos de la nobleza y terminó administrado por el Estado. Entonces fue que la educación cayó en manos de los maestros quienes a través del castigo físico impartían la disciplina y el deporte para formar individuos que luego fueran educados con filosofía, ciencias naturales, sociales, matemáticas y literatura y fue así que se creó la enciclopedia con Alejandro Magno para los hombres cultos, lo que fue una gran referencia de refinamiento y civilización. Pero fueron los romanos los que crearon las primeras escuelas; como la escuela básica y la episcopal(secundaria), con Aristóteles, y así pasaron mil 500 años para darse el Renacimiento y romper esquemas de enseñanza.
Conocer la historia de la educación, es fundamental ya que dota a las nuevas generaciones de las bases de la educación y pedagogía, lo que ayuda a comprender que educar es lograr formar y definir su identidad individual o colectiva mediante conocimientos de la cultura propia y de otros países, y que es un derecho humano para todos eficaz para reducir la pobreza, la desigualdad y mejorar la salud.
Tendremos que preguntarnos si la falla en la educación somos los estudiantes de manera individual, los métodos de enseñanza o la capacidad de los maestros. El que estudia seguramente tendrá un buen futuro, pero ¿qué pasa si la educación es obsoleta?, ¿qué sucederá si no hay quien imparta clases?, ¿qué pasará con nuestros niños y jóvenes? Es entonces la sociedad del siglo XXI, y la era de la tecnología que genera una falsa apreciación de conocimiento con información en exceso, que afecta la calidad de educación lo que hace una diferencia entre un mundo lleno de éxitos y oportunidades o un mundo lleno de frustraciones, lo que sí sabemos es que la educación definitivamente impacta en la calidad de vida de las personas.
