Norteamérica sería una mayor potencia si México desarrollara su economía de mejor manera. Canadá y Estados Unidos, países primermundistas, son el tercer y primer lugar respectivamente de inversión extranjera en el país, y junto a ellos somos parte del tratado comercial más trascendente en el mundo, llamado T-MEC, que sustituyó al Tratado de Libre Comercio (TLCAN).
Para nadie es un secreto que nuestra economía se mueve en gran parte por este tratado comercial. Para bien o para mal, compartimos nuestra frontera norte con los Estados Unidos, y es esa franja precisamente la que es un gran motor de nuestra dinámica económica.
Nuestros problemas vienen desde la colonización. México bajo el yugo y derroche de los españoles, y nuestros socios comerciales, bajo un sistema capitalista naciente de los ingleses.
Claro que nuestros socios tienen problemas, pero no mayores que a los nuestros. Y aunque duela aceptarlo como mexicanos, por mucho tiempo hemos sido el patito feo de la región norte de América. Hemos perdido la oportunidad histórica de ser una potencia, de estar a la par de ellos.
Echarle la culpa en este espacio al presidente López Obrador, sería no haberle echado un repaso a la historia del país. Pero sí podemos decir que el mandatario nacional actúa a contracorriente a lo que se firmó en el T-MEC.
Mientras Canadá a través de sus empresas –las cuales buscan desde luego obtener ganancias- se especializan en energías verdes, en el territorio azteca regresamos al pasado aumentando la producción eléctrica basada en el carbón, y en donde en el actual gobierno federal, han hecho hasta lo imposible para ahuyentar dichas inversiones del país.
Respecto a los Estados Unidos, en vez de cuidar la relación y aprovecharse de los beneficios de ser sus vecinos, desde Palacio Nacional, hacen todo para acércanos más a China. Ah que caray. No es que ser socios de los chinos no sea benéfico, pero no juguemos a la anécdota del perro que se quedó sin las dos tortas.
EL REMATE
En base al último reporte de la Secretaría de Economía en el mes de agosto del 2022, el comercio de los Estados Unidos con México creció 20.4%, con incrementos de 20.1% en sus exportaciones y 20.7% en sus importaciones. México se mantuvo como el principal proveedor de vehículos y bienes agrícolas de Estados Unidos, así como su segundo mayor proveedor de maquinaria y electrónicos. Entre enero y agosto de 2022 el valor de las importaciones de Estados Unidos provenientes de México reflejó un crecimiento significativo en términos anualizados, particularmente en los sectores de vehículos (+17.3%), maquinaria (+20.5%), electrónicos (+12.8%), productos químicos (+28.9%) y metales y sus derivados (+38.1%).
