El incierto 2024

0
223

Por Fernando Urbano 

Durante cinco años el presidente ha dirigido la agenda nacional y de la oposición con una receta simple y sencilla, insultando y denigrando a quien se le ponga enfrente. La administración de este sexenio no tiene apertura, ha limitado la libertad política y la competencia electoral, a través de una vigilancia excesiva acompañada de chantajes, control y manipulación. 

Pero el 2024 será un año excesivamente incierto, con riesgos graves, una que otra buena posibilidad y escenarios muy particulares. Todos estos dirigidos por el enojado, frustrado y visceral presidente López Obrador. Y no es para menos, desde hace unas semanas el control que presumía tener, se le ha ido de las manos, no sabe cómo retenerlo y en un intento de recuperarlo ha excedido su manera de violar la ley. 

En sus intentos de limitar a la oposición, particularmente a una de sus aspirantes a sucederlo, se publicó en la cuenta personal de twitter de López Obrador,  información fiscal confidencial; pero hacer públicos los contratos privados de una empresa,   es un delito, y una muy clara señal de autoritarismo. Además dicha información la manipuló públicamente en un intento de convertir en un delincuente a la aspirante presidencial. 

Con esto, Don presidente, nos deja algo claro,utilizará todos los recursos del estado para influir, controlar o manipular, según sean sus necesidades, el próximo  proceso electoral, y sin escrúpulos atentará contra cualquiera que potencialmente pueda derrotarlo. 

Su corcholata está muy lejos del camino y la estrategia que él definió, en la que se haría de la presidencia de forma cómoda y sin competencia. Su estrategia y sus anhelos son cada día más debiles, asi que sin dudarlo, el presidente está empezando a generar las condiciones para polarizar en exceso el clima electoral, ejemplo de ello es que ha incrementado su discurso de odio y división social entre los que él llama “conservadores”, y sus fieles seguidores, los “liberales”. 

Además del constante mensaje que la perversidad de la mafia del poder, intelectuales, medios de comunicación y Estados Unidos, están conspirando contra él, su gobierno  y su partido.

Si el proceso se le va totalmente de las manos, aplazar o suspender las elecciones,  deben ser al menos dos de las opciones más consideradas de López, y que de ser concretadas, sus aliados del crimen organizado seguramente serán los encargados de desestabilizar al estado de la mano de algunos gobernadores de Morena. Bajo la lógica “obradorista”, el poder del estado está a su disposición en contra de cualquier acción que atente contra la 4T y su fallido proyecto de nación. 

Al final de cuentas el principal enemigo de Andrés Manuel, es y serán los votos, él sabe que aquellos que obtuvo en el 2018, hoy son solo la mitad, y que el voto de castigo que se ha ganado a pulso, puede ser tan grande en contra de él y de su partido, que puede superar al voto duro obradorista y al voto clientela de sus programas sociales. 

El cobarde y criminal presidente, cometerá en los próximos meses más delitos que los que ha realizado en todo su sexenio, protegido por una fiscalía a modo, y alimentado por sus deseos de perpetuidad y antidemocracia. 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí