Por Jesús Alvarado / Israel Reyes
¿Cómo fue tu experiencia al tratar a pacientes de COVID-19?
Fue todo un reto. Nos llegó de sorpresa una enfermedad que nadie conocía, absolutamente nadie sabía cómo se iba a comportar. Nadie conocía los tipos, los tratamientos, de hecho, hasta la fecha el día de hoy apenas comienzan a salir tratamientos aprobados. Para nosotros, como médicos, fue muy difícil el reto, porque la población de Saltillo acudía a nosotros gente muy grave y experimentando con lo que veíamos y aprendíamos en ese momento en nuestro país y en otros países, para tratar de implementarlo en la población saltillense. Murió mucha gente conocida, como familiares y amigos. Todo el equipo estuvo muy comprometido para dar la atención a todos los pacientes. Fueron dos años muy difíciles.
¿Cómo dar la batalla ante la impotencia de un virus desconocido como el COVID?
La impotencia porque muchas veces no podíamos hacer algo. Darles de lo poco que sabíamos, como por ejemplo de la experiencia que habíamos tenido con la influenza, tratarlos más o menos parecido, pero la realidad era que siempre se comportaba diferente. Fue muy impotente el no tener un tratamiento, como una bacteria y darle antibiótico, penicilina. No teníamos algo que estuviera demostrado que les pudiera beneficiar en ese momento.
¿Cuál era el sentir del equipo de trabajo?
Como todo, hubo personal que no quiso. La gran mayoría de los doctores no quisieron. Fue muy difícil conseguir quién nos apoyara. También en enfermería fue difícil, pero siempre les reconozco porque fueron los que estuvieron más al pie del cañón que los médicos en el área, ya que eran quienes cumplían un turno, 24 a 7 los tres turnos con todos los pacientes y eso siempre se los voy a reconocer.
¿Qué pasaba por tu mente en temas familiares?
Dramático. No pude llegar a casa, no era normal. Tenía que llegar y hacer todo un proceso de cambiarme en la lavandería. Tenía miedo de abrazar a mi familia y generar una situación de riesgo como contagiarlos. Fue demasiado difícil.
¿Estuvo el gobierno federal a la altura ante esta emergencia sanitaria?
No, México fue el peor país en el manejo de la pandemia por la toma de decisiones del gobierno. Fue donde más muertos hubo en el mundo por esta causa. Donde las instituciones no tuvieron presupuesto, está demostrado en todas las revistas internacionales que el manejo de la pandemia en nuestro país fue terrible.
¿Se está cumpliendo el objetivo con el tema de la vacunación COVID?
La vacunación si ha cumplido, tardíamente, pero lo está haciendo en su propósito. Ya más del 80 por ciento de la población debe estar vacunada.
Ya se está dejando de utilizar el cubrebocas. ¿Es momento de bajar la guardia?
Dado el número de vacunados yo creo que ya vale la pena de ir pensando en el corto, mediano y largo plazo de dejar el uso de este. Hay lugares que aún no recomiendo como los hospitales, ya que viene el paciente enfermo de síntomas respiratorios y muchas veces va ser COVID. Ya no se hacen las pruebas que se hacían de este virus, muchos pacientes con síntomas respiratorios ya no se hacen la prueba y muchos son COVID. Finalmente, la vacunación y las mutaciones que ha tenido que ha perdido su mortalidad el virus, han hecho que sea leve como un cuadro viral, como un cuadro de resfriado.
¿Corre México el riesgo de que pueda existir una nueva ola?
No, los expertos a nivel mundial y lo que se ha visto es que puede haber rebrotes. Como por ejemplo aquí mismo en Coahuila hace poco hubo 40 casos nuevos que siempre van a darse, pero no ha habido defunciones. El COVID no se va acabar, es algo endémico, como la influenza ¿Va a ver muertes? sí, pero solo de vez en cuando y no al impacto que tuvimos de ser una pandemia.
¿Tienen los protocolos necesarios?
Sí, ya estamos preparados. Ya pasó lo peor. Desafortunadamente ya se murió la mayoría de la población que tuvo que haber fallecido por esta causa. Los hospitales ya sufrieron las crisis. Yo creo que no vamos a llegar al punto del sobrecupo que hubo en su momento.
¿Qué tanto ha cambiado lo que dejó en evidencia en los hospitales públicos el COVID?
Va a seguir igual. La falta de presupuesto para la salud en México no ha cambiado. El Gobierno de México recortó en miles de millones de pesos en este año respecto al año anterior. Todo esto se traduce en menores insumos, menor número de médicos, menor todo. Entonces esto se va a ver reflejado en la salud de los mexicanos.
¿Cuál es tu opinión sobre que México tenga que recurrir a médicos extranjeros?
Esto tiene un trasfondo político más allá de decir que no hay médicos. Es una falsedad. Médicos mexicanos hay muchos. Los 500 médicos que trajeron no van a suplir la demanda de médicos que requiere el país, debe ver un trasfondo político y económico para que este siendo una cortina; por ejemplo, cada médico cubano que llegó, el gobierno mexicano pagó casi 300 mil pesos por cada uno de ellos. Es ilógico, porque ni siquiera son especialistas. La mayoría de los médicos, que he platicado con colegas que estuvieron en hospitales donde llegaron estos médicos cubanos, eran generales o solo personal de enfermería. Realmente ni estaban capacitados en la atención o apoyo COVID a pacientes. Sigo creyendo que tiene un trasfondo político.
¿Qué tan politizado ha estado el presupuesto necesario en materia de salud?
Nosotros debemos preservar la vida a pesar de todo. Siempre voy a tratar de preservar la vida de mi paciente a pesar de todo. El problema es que el recorte presupuestal no viene hecho por médicos. Si los médicos hicieran el presupuesto de cuanto le va a tocar a cada hospital, los hospitales serían de primer mundo.
¿Hacen falta médicos políticos en el país?
Sí, definitivamente el sistema de salud debe tener médico con capacitación en administración hospitalaria. Eso es algo que incluso yo voy a empezar una maestría en eso. Nosotros debemos de saber qué es lo que está sucediendo. Eso debe de ser prioritario.