El dólar estadounidense retomó su tendencia al alza este jueves 21 de noviembre, tras varios días de descensos posteriores a las elecciones en Estados Unidos. Este repunte se da en un contexto donde los inversionistas analizan las posibles políticas del presidente electo, Donald Trump, y los futuros movimientos de la Reserva Federal respecto a las tasas de interés.
El peso mexicano, por su parte, sufrió su segunda jornada consecutiva de pérdidas debido a la cautela en los mercados. La moneda nacional se ubicó en 20.33 pesos por dólar, registrando una depreciación del 0.40% en comparación con el cierre anterior.
Factores que afectan al peso mexicano
De acuerdo con expertos de Banco Base, varios elementos explican la debilidad del peso:
- Aversión al riesgo global y local: Las tensiones geopolíticas, incluidas la guerra en Ucrania y los desafíos institucionales en México, generan incertidumbre entre los inversionistas.
- Fortalecimiento del dólar: La moneda estadounidense se mantiene como refugio seguro en momentos de incertidumbre económica.
- Percepción negativa sobre México: La aprobación de reformas que eliminan organismos autónomos afecta la confianza de los mercados.
Comparativa con otras divisas
El dólar ha mostrado un desempeño mixto frente a otras monedas:
- Ganadoras: Yen japonés (+0.60%), shekel israelí (+0.23%), peso colombiano (+0.22%).
- Perdedoras: Real brasileño (-0.85%), peso mexicano (-0.39%), rublo ruso (-0.34%).
Tipo de cambio al inicio del día
El tipo de cambio interbancario comenzó en 20.32 pesos por dólar, según Bloomberg, reflejando el impacto de tensiones internacionales y datos económicos en Estados Unidos que no cumplieron con las expectativas.
Cierre previo
Ayer, el peso cerró con una depreciación del 0.74%, ubicándose en 20.24 unidades por dólar, tras acumular ganancias durante las cinco jornadas anteriores.
Este panorama muestra la sensibilidad del peso mexicano frente a las dinámicas globales y locales, resaltando la necesidad de monitorear los próximos anuncios de la administración de Trump y la evolución de las tensiones geopolíticas.
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