El gobierno de Claudia Sheinbaum ha llevado a cabo la expropiación de más de 38 hectáreas, que abarcan 60 propiedades privadas, en 21 municipios de los estados de Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, para avanzar en el proyecto del Tren Maya. Esta medida fue publicada en un decreto en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 28 de octubre de 2024.
La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) indicó que estas tierras se utilizarán para obras de infraestructura pública, aunque no especificó cuáles serían. En Palenque, Chiapas, se expropiaron seis inmuebles que suman 25,676.39 metros cuadrados, equivalentes a 2.56 hectáreas.
En Tabasco, la expropiación incluyó mil 30.75 metros cuadrados en Balancán y 7,973.28 en Tenosique. En Campeche, se expropiaron 20 propiedades que abarcan 210,459.818 metros cuadrados (21.05 hectáreas) en varios municipios. Yucatán se vio afectado con 9.4978 hectáreas (94,978.49 metros cuadrados) repartidas en nueve inmuebles en diferentes localidades. En Quintana Roo, se expropiaron 23 inmuebles que representan 19,679.939 metros cuadrados en Felipe Carrillo Puerto, Othón P. Blanco y Solidaridad.
En los últimos dos meses, se han realizado cerca de 50 expropiaciones en el sur del país para continuar la construcción del Tren Maya. Un día antes de concluir su mandato, el expresidente Andrés Manuel López Obrador promulgó un acuerdo que instruye a las dependencias gubernamentales a acelerar los trámites necesarios para completar el proyecto, con un plazo de tres meses. La administración actual debe realizar actos jurídicos antes de finalizar el año para asegurar la operación de los siete tramos del Tren Maya, con un compromiso de concluir los procesos en un máximo de seis meses.