Por Jesús Alvarado
Para nadie es un secreto que no somos ni seremos autosuficientes en una gran cantidad de cosas. En el maíz, por ejemplo.
Tenemos todo para serlo. Bueno, salvo lo más importante. La voluntad política que en la mayoría de las veces obedece a la corrupción, negocios e intereses personales.
Mis columnas parte de mis lecturas. Parten de lo que observo en el día a día. Parte de las pláticas con amigos.
Vaya, el relato entre persona te lleva a la escenografía de lo que pasa en una comunidad, localidad o el país. En base a mis apuntes en mi cuaderno cuadrado, anote que nuestro país compra casi el 7 por ciento de las exportaciones de gas natural a nuestro vecino del norte, Estados Unidos.
Tenemos la zona del gas, pero por malos manejos y la falta de credibilidad, la sociedad no permite la explotación mediante algunos métodos. El hacer mal las cosas hace que la gente ya no confíe inclusive en factores que benefician al país.
En cuestiones agrícolas, mineras, tecnológicas y demás áreas pudiéramos ser una potencia, pero no somos ni seremos, dejamos pasar las oportunidades.
Estados Unidos en el tema del gas natural se da el lujo de venderle el 3.50 por ciento de su exportación a Canadá, quienes son una de las principales potencias en el mundo.
Esto es producto de la falta de estrategia, producto de una falta de rumbo del país, de a dónde queremos llegar como nación. Porque no somos, ni seremos.
No somos potencia educativa. Ni seremos en el corto ni mediano plano con el 90 por ciento de los planteles públicos educativos del país con carencias para operar. No somos potencia mundial porque independiente de la fuerza política que gobierne, se velan por intereses personales, no de la nación.
Seamos honestos, vamos encaminados a cometer errores que en pocos años nos lleven posiblemente al peor panorama en las últimas décadas.
Que la boca se me haga chicharrón, porque lo que queremos es crecer como nación.
EL REMATE
Vayamos a los datos. El top tres de países que más compran este energético a Estados Unidos lo completan Canadá y Nicaragua, pero han reducido el nivel de compras durante este inicio del 2024.
Esto implica que, pese a la diversificación en los compradores de gas natural de Estados Unidos, México se mantiene como el principal comprador, aunque con una participación significativamente menor a la que tenía hace algunos años. (En 2016 las compras mexicanas de gas natural estadounidense representaron cerca del 60% del total).
El top tres de países que más compran este energético a Estados Unidos lo completan Canadá y Nicaragua, pero han reducido el nivel de compras durante este inicio del 2024.