De cadete a presidente, la vida de Mariano Arista

0
233

Cultura 134

Mariano Arista, un destacado personaje de la historia mexicana, fue un político y militar que ocupó la presidencia de México entre 1851 y 1853. Nacido en San Luis Potosí en 1802, provenía de una familia con una fuerte tradición militar, y desde temprana edad se dedicó a la carrera de las armas. Su ascenso en el ámbito militar lo llevó a convertirse en una figura prominente en la política de México durante el siglo XIX.

La influencia de la tradición militar en su familia se remonta a generaciones anteriores, con sus abuelos que sirvieron en regimientos militares. Mariano Arista continuó esta tradición al recibir instrucción militar desde joven y entrar al servicio de varios regimientos en diferentes partes de México.

Su presidencia marcó un hito al ser el primer presidente mexicano nacido en el siglo XIX, y su legado está ligado a su participación tanto en la esfera militar como en la política de México. A lo largo de su vida, su trayectoria militar y política influyó en el curso de la historia de México.

José Mariano Martín Buenaventura Ignacio Nepomuceno García de Arista Nuez, conocido como Mariano Arista, tuvo una destacada carrera militar y política en la historia mexicana. Desde sus inicios en el ejército realista hasta su participación en el sitio de México y su destierro en Estados Unidos, Arista estuvo involucrado en eventos clave de la historia de México. Tras su regreso a México en 1834, apoyó la deposición del gobierno radical de Valentín Gómez Farías y ocupó diversos cargos militares, incluyendo el de comandante en jefe de Tamaulipas.

Durante la invasión estadounidense en 1846, Arista fue nombrado comandante del Ejército del Norte, pero sufrió derrotas significativas en las Batallas de Palo Alto y la Resaca de Guerrero, siendo destituido del mando. Sin embargo, su trayectoria militar no impidió su nombramiento como ministro de Guerra durante la administración de José Joaquín de Herrera. Durante su gestión, Arista implementó cambios radicales en el ejército, reduciendo el número de soldados y reorganizando la estructura militar de acuerdo con el deseo de Herrera de un ejército más eficaz y al servicio del poder civil.

Arista también estableció una nueva Guardia Nacional, formada por voluntarios, y reprimió con éxito diversas rebeliones militares durante el gobierno de Herrera. Su papel influyente en el gabinete y sus esfuerzos en la reforma militar contribuyeron en gran medida a los logros del gobierno de Herrera.

Las elecciones presidenciales de 1850 en México fueron un evento significativo que contó con la participación de al menos 15 candidatos, algunos de los cuales fueron nominados por periódicos o respaldados por sus amistades o partidos. Entre los candidatos nominados por la prensa mexicana de la época se encontraban Ramón Adame, Juan Nepomuceno Almonte, Arista, Francisco Berduzco, Nicolás Bravo, José Bernardo Couto, Gregorio Dávila, Valentín Gómez Farías, Manuel Gómez Pedraza, Domingo Ibarra, Antonio López de Santa Anna, A.G. Iturbide, J.F. Ramírez, Luis de la Rosa y Ángel Trías Álvarez.

Durante la campaña, Mariano Arista enfrentó dificultades a pesar de contar con el respaldo de varios periódicos en diferentes regiones. Fue acusado de debilitar al ejército con sus reformas y de dejarlo sin defensa. También se le señaló por su supuesta falta de principios, apoyando la condena del destierro de su propio padre y forzando ilegalmente la renuncia del ayuntamiento de la ciudad. Además, se le acusó de corrupción, inmoralidad y de estar implicado en varios asesinatos.

A pesar de estas acusaciones, el Tribunal Militar investigó la conducta de Arista durante la guerra contra Estados Unidos, lo exoneró y publicó los resultados de su investigación a mitad de la campaña presidencial. La propaganda en su contra fue intensa, con acusaciones de abuso de poder, cobardía, subversión del orden público y uso indebido de fondos públicos. En respuesta a la protesta de los jefes de redacción de varios periódicos en su contra, Arista arrestó y encarceló a dichos jefes de redacción y al director de la imprenta que publicó la protesta.

Estos eventos reflejan la intensa y controvertida campaña presidencial de 1850 en México, en la que Mariano Arista enfrentó acusaciones y desafíos significativos.

Los resultados de las elecciones primarias en México en 1850 marcaron un hito en la historia política del país. Tras una primera etapa de elecciones en agosto y una segunda en septiembre, Mariano Arista emergió como el candidato líder. La importancia de las elecciones primarias en el Distrito Federal en septiembre fue crucial, y a pesar de la campaña en su contra por parte de los conservadores, Arista logró obtener una victoria significativa.

El 14 de noviembre de 1850, el periódico El Monitor Republicano proclamó la victoria del general Mariano Arista, con votos provenientes de varios estados y territorios. Estos resultados consolidaron su posición como presidente electo, con una mayoría requerida. En la capital, Arista obtuvo una cantidad significativa de votos, lo que respaldó su liderazgo en la República Mexicana.

El 8 de enero de 1851, el Congreso federal revisó los resultados de las elecciones y, tras un proceso de deliberación, Mariano Arista, de 48 años, asumió el cargo de presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos el 15 de enero de 1851. Su presidencia estuvo marcada por una severa crisis económica, y a pesar de sus esfuerzos por imponer orden en las finanzas y combatir la corrupción, su administración enfrentó dificultades significativas.

Arista intentó impulsar proyectos de infraestructura y desarrollo, como la primera línea telegráfica entre la capital y el puerto de Veracruz, la concesión para la construcción del ferrocarril en esa ruta, y la promoción de la minería, la agricultura y la incipiente industria mexicana. Sin embargo, la situación financiera del país desencadenó una revuelta que llevó a su renuncia el 5 de enero de 1853.

Tras su renuncia, Mariano Arista dejó el poder al Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juan Bautista Ceballos, y partió hacia Europa. Su salud se deterioró durante su viaje, y falleció a los 53 años de edad en el océano Atlántico el 7 de agosto de 1855. Sus restos fueron trasladados a México en 1881, donde fue declarado Benemérito de la Patria y se le otorgó un lugar en la Rotonda de las Personas Ilustres.

El legado de Mariano Arista en la historia de México se destaca por su papel como presidente electo y sus esfuerzos por impulsar el desarrollo del país, a pesar de los desafíos que enfrentó durante su mandato.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí