Por Jesús Alvarado
Amena charla de café mantenía con amigos comunicólogos de profesión y de vida, ya que uno es de vida, y debatimos sobre el acceso al internet en el pequeño municipio de Progreso, Coahuila, donde coincidimos en la primera piedra de lo que será el cuartel de la Policía Estatal de Coahuila.
Ahí nació la pregunta o cuestionamiento sobre el acceso a internet, ya no digamos en las grandes poblaciones del país, sino de las comunidades rurales.
Vaya coincidencia, en días pasados descubrí en medios nacionales que México conserva una brecha de desigualdad importante: el 32 % de los hogares más pobres y el 79 % de los más ricos cuentan con acceso a internet.
Sin duda, los números son fríos. Chile, Argentina y Costa Rica son los tres países con menos brecha de desigualdad en conectividad digital. A nivel mundial, los países del norte de Europa y Europa Occidental, como América del Norte, son las regiones con menos desigualdad en cuanto a acceso a internet.
Lo cierto es que el territorio azteca es un país complicado, quizá un caso parecido al de Brasil. Son las dos economías más pujantes de la Latinoamérica, economías emergentes, pero con territorios geográficos tan grandes y con áreas de difícil acceso.
Canadá y Estados Unidos también tienen territorio grande, pero con una economía desarrollada, sustentada en una infraestructura en lo general no de años, sino de décadas.
Los nuevos modelos de mercado, venta, trámites gubernamentales y acceso al mundo te obligan a mantener una conectividad. Los nuevos modelos de educación son basados en clases en línea o módulos de estudio de clases virtuales.
Chile ha logrado conectar a casi el total de su población sin importar los ingresos; el 94% de los hogares más pobres y el 98% de los más ricos tienen acceso a internet.
Comparado el caso de Chile con México, habría que señalar que en nada se compara el tamaño geográfico entre uno y otro país. A favor de Chile, un país que ha trabajado bien en su economía en las últimas dos décadas.
Ahora bien, tener el acceso a internet es muy diferente a que la población que lo tiene lo aproveche al máximo. ¿Cuántas personas en nuestro país o pequeñas empresas realmente sacan utilidad del internet?
Inclusive tenemos hasta poca seguridad cibernética. En México hay un alto índice de delitos cibernéticos, ocupando el primer lugar en los países de Latinoamérica. De hecho, en 2022, 13 de cada millón de internautas mexicanos fueron afectados por ciberdelincuencia.
La empresa Fortinet, enfocada en la ciberseguridad, rebeló en su último informe del panorama global de amenazas, que en México han ocurrido 187 mil millones de tentativas de delitos cibernéticos. El país se encuentra en el puesto 9 del ranking global de mayor densidad de ciberdelitos per cápita.
EL REMATE
Vayamos a otros datos. Durante el 2022, la cifra más reciente disponible, el valor agregado del comercio electrónico en México fue de 1,749,091 millones de pesos, a precios corrientes.
Esta generación económica representó un crecimiento interanual de 37% en términos reales, de acuerdo con las estimaciones del Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía). Esta expansión es parte de la tendencia positiva de la compra y venta de bienes y servicios en espacios digitales.